Por El Tiburón
Los días 16, 17 y 18 de este mes de mayo, o sea el fin de
semana pasado, estuvieron en Ixtapa 149 reporteros, articulistas y columnistas
de nuestro Estado afiliados al Fondo de Apoyo a Periodistas para celebrar la XI
Convención Estatal de Periodistas de Guerrero, evento que se llevó a cabo en el
Hotel Holiday Inn de Ixtapa. No lo voy a engañar, mi estimado lector, vino de
todo un poco; variadito, como es en el terreno de la realidad el periodismo de
Guerrero: Algunas plumas pesadas, reconocidas y otras que no lo son tanto.
Comentan los asistentes que el hotel Holiday Inn casi acaba
con la citada Convención Estatal; en primer lugar, los que participaron platican
que, a pesar de que la Secretaría de Desarrollo Social del gobierno del estado
aflojó muchos miles de pesos para sufragar el hospedaje y el costo del local
para la celebración de las reuniones, el hotel Holiday Inn, trató a los
convencionistas como si hubiera sido “de gorra” el servicio, pues durante las
conferencias y las reuniones de la Convención no hubo aire acondicionado en el
salón y no sólo eso, afirman que una parte de los cuartos ocupados por los
periodistas tampoco tuvieron clima artificial, así que ya se imaginará las
noches que pasaron aquí estos compañeros que vinieron desde los lugares más
recónditos del estado para resolver los grandes dilemas del periodismo mundial.
Así como están los calores en Ixtapa y la Convención sin
aire; usted sabe que aquí, luego de media hora de sudores, huele uno a chivo
correteado. Pero la verdad es que los periodistas dieron muestra de un aguante
bárbaro, resultaron más estoicos que Zenón, el de Citio. Nadie corrió, nadie
propuso pedirle al hotel que devolviera las entradas; nadie pidió que se
trasladara la Convención a otro hotel más decente. Yo la verdad no me explico
tanto aguante, ya ve usted que los periodistas tienen fama de “pederos”, nomás
quieren tantito para hacerla de emoción, sin embargo ahora se aguantaron como
los meros machos y no hubo protestas.
En segundo lugar, los compañeros asistentes a la Convención,
inmediatamente después de haber abandonado el hotel, fueron de rodillas hasta
Petatlán a dar gracias a “Papa Chuy” por haber salido vivos del Holiday Inn,
pues tres de los convencionistas presentaron síntomas de salmonelosis
seguramente provocados esos síntomas por algunos platillos en descomposición
que se recetaron. Como usted no entiende estos términos especializados,
permítame decirle en lenguaje llano y claro que a tres camaradas (entre ellos
el internacionalmente laureado Miguel Angel Mata Mata) les pegó un chorrillo
espantoso que los llevó hasta el hospital, los dejó fuera de varias actividades
y seguramente quedaron muy maltratados de la parte posterior de su humanidad
por el sinnúmero de veces que tuvieron que visitar los sanitarios y si bien es
cierto que el papel sanitario no es tan rasposo, la verdad es que después de
usarlo 500 veces en un día, haga usted de cuenta que se pasa por detrás una
lija del cero. Vaya usted a saber, a lo mejor Beatriz Mojica no pagó el costo
del servicio del hotel y por eso los compañeros tuvieron que aguantar vara,
como se dice en el lenguaje coloquial.
Finalmente les platico que a la multicitada Convención se
registraron 149 periodistas, sin embargo afirman que en las reuniones y
conferencias asistían sólo alrededor de 50 individuos. Algunos atribuyen el
ausentismo a la falta de aire acondicionado y de plano culpan al hotel Holiday
Inn; otros creen que en realidad se colaron como 100 fulanos que nomás querían
venir a pasear a Ixtapa con los gastos pagados por el Fondo de Apoyo y otros
más sospechan que los faltistas se están preparando para cuando sean diputados.
Colaboración para el Diario de Zihuatanejo.