lunes, 21 de febrero de 2011

Denle chance: En dos o tres periodos seguro aprende algo

Dicen que apenas que hubo regresado a su cargo, el alcalde de Acapulco, Manuel Añorve Baños, le dio callo a su secretaria de turismo municipal y la sustituyó por Erica Lührs Cortez, quien no sabrá de turismo pero sí de fidelidades “priyistas” mismas que siempre le reconocen dándole chambas de las que, por lo general, desconoce, pero que de todas formas “desempeña” y le permiten cobrar sus quincenas religiosamente.
Cuentan que ha habido protestas en parte por que en Acapulco hay grupos pesados que se pelean por controlar los cargos y en esta ocasión aprovechan que la flamante secretaria pues no se mueve en las aguas del turismo precisamente como un pez.
Unos le piden que ponga en el cargo “a una persona especializada, certificada por el sector, ya estuvo bueno de ensayos. Como principal generador de la economía en el municipio, la Secretaría de Turismo requiere gente capaz y gente especializada, porque si no hay turismo Guerrero se acaba”.
El presidente del Colegio Nacional de Profesionales en Turismo, José Luis Basilio Talavera, calificó de “incongruencia y una mala decisión la de poner en la Secretaría de Turismo Municipal a una persona que no cubre el perfil y que solamente traten de llenar ese espacio por los compromisos políticos o premios de consolación, que lo único que logra es un atraso en materia de turismo”.
Yo creo, estimados amigos, que no es para tanto. Los acapulqueños deberían aprender de Zihuatanejo, donde el presidente optó por colocar en la dirección de turismo a un político muy amigo suyo y no a un especialista del sector. Bueno es cierto que no hay resultados inmediatos pero está aprendiendo; quizás en unos tres periodos como director y luego que haya recorrido medio planeta, a lo mejor llega a ser un buen director de turismo. Estamos invirtiendo. Así con Erica Luhrs; que la dejen unos tres, cuatro periodos a ver si aprende. Total no urge, no hace falta. Bien puede Acapulco seguir así como está de menos otros doce años.