Haciendo Tiritas

¡Ahí viene Raúl García y nos quiere hacer “cantar”!
Usted sabe que en la reciente campaña política del ilustrísimo señor Don Manuel Añorve y Baños en este rincón (hasta con telarañas, como corresponde a todo rincón) de la Costa Grande de Guerrero, su contacto por excelencia fue el también ilustre Don Raúl García y Urióstegui, coordinador de la multitud de asesores del presidente municipal, Don Alejandro Bravo y Abarca. Bueno, aunque hay que reconocer que de última hora se le fue colando por delante (no por detrás) el nunca bien ponderado licenciado y doctor en leyes por Santo Domingo University, Don Obdulio Solís y Bravo.

Pero en lo que no hay duda es en que, de los tres que han venido sonando como suspirantes a la candidatura “priyista” para la próxima contienda en la que elegiremos al que habrá de seguir los pasos del alcalde Alejandro Bravo, Don Raúl García y Urióstegui era el que estaba más “amarrado”, dicho esto con todo el respeto debido a Don Raúl y sin que esta expresión se preste o se alquile a interpretación jocosa o malintencionada. Quiere decir la frase en comento que era Don Raúl quien tenía más compromisos políticos establecidos con el difunto… perdón con el fallido candidato a la gubernatura. Los otros dos que sonaban con los mismos suspiros, los jóvenes imberbes Jorgito Allec y Maciel y Eriquín Fernández y Ballesteros, claramente se vio que andaban por otros rumbos políticos y que si ganaba la gubernatura el doctor Don Manuel, tendrían que posponer para otros tiempos sus negras y aviesas intenciones. Por esta extensa razón se creía que Don Raúl García, luego de la cruenta batalla y la infausta derrota del RIP, estaría fuera de la jugada política y casi casi en el mismo nivel que otros cadáveres políticos del jurásico tricolor, como Don Armando Federico González y Rodríguez y Don Juan Nava y Analco, entre otros distinguidos ciudadanos.
¡Ah! Pero no contaban con la astucia de Don Raúl, quien ahí viene con todo y decidido a lograr que todos ustedes canten como ruiseñores en cuanto lo vean. No se asusten, no se trata de un interrogatorio policiaco con pocito, toques en los órganos sexuales y tehuacanazos, sino de cantar realmente unas bellas composiciones que el bardo sanluisino ha sacado de su honda y profunda inspiración. Sí, él quiere hacerlo cantar a usted y no mandándole al “Cono” y sus muchachitos, sino poniendo a su disposición a una auténtica banda musical con buenos cantantes, como corresponde a la calidad del compositor.
Apenas el pasado lunes se presentó en una estación de radio para dar a conocer sus cubanísimas composiciones que si no las apreciamos los zihuatanejenses las ha de aplaudir el mismísimo Fidel Castro, aunque no le guste la salsa más que para echarse unos mexicanos tacos de carnitas.
Lo más destacado que escucharon mis castos oídos, además del himno cubano a Zihuatanejo, fue una canción por la paz también de la autoría del poeta de San Luis La Loma; así como lo oye usted, Raúl García compuso una canción por la paz, donde dice que estamos hartos de tantos muertos con la guerra que estamos viviendo entre ya sabe quienes y ya sabe quienes. Seguramente usted estará pensando que he perdido algunas tuercas de mi cabeza, pero no, mi estimado señor, así como se lo platico así ocurrió. Si usted hasta ahora asociaba el nombre de Raúl García con la policía perjudicial, con leves o profundas calentadas y exigencias de “canto” a los detenidos, además de dos o tres derechazos contra periodistas acelerados, deberá usted borrar de su cabeza esta imagen por que estamos hablando de un nuevo Raúl, bueno no tan nuevo, pero diferente a lo que usted sabía de él, a lo que creía, pero le daba pena preguntar.
Resulta, mi estimado señor, que mientras usted y yo nos dedicábamos a cosas vanales, a la disipación y la lujuria, a corretear mozuelas por los campos del reino de Cihuatlán, Don Raúl García y Urióstegui llamaba a las musas para que le ayudaran a pulir versos de arte mayor y, por qué no, de arte menor, para que vean que a todo le entra en lo que a poesía se refiere. Y por eso hoy, aparece como con 100 composiciones que muestran que detrás del Tehuacan y el pocito había un hombre sensible que sólo puede hablar de amor y de paz.
Así que, mi estimado señor: Si usted por endebles y equivocados razonamientos había borrado de la lista de los “presidenciables” al licenciado Don Raúl García y Urióstegui, vuélvalo a incluir por que está de vuelta pero con su personalidad real, la del poeta, la del músico (no música), la del hombre sensible, la del hombre con un corazón que tiene que cargar en una maleta por que no le cabe en el pecho, con ese carácter que con tanto éxito reprimió y ocultó por años y que hoy nos sorprende gratamente. Así que, mi estimado señor, dispóngase a cantar todo lo que sabe por que ahí viene Don Raúl García, armado con un rimero de versos y canciones. ¡Aaaauuuuyyyyaaajajaaayyyyy! Perdón, se me escapó este grito medio raro. 


Chistosos el Roberto y el Efrén
Oiga usted, no me había percatado de la gran vena histriónica que poseen Efrén Leyva Acevedo, presidente (a punto de entregar el changarro) del Comité Directivo Estatal del RIP y Roberto Torres Aguirre, representante del mismo partido ante el IEEG. Dicho menos pomposamente, qué chistosos son estos fulanos.
Apenas ayer ocuparon espacios importantes en los medios de prensa con declaraciones que asustan y luego mueven a risa. Dice la nota que el CDE del “chicolor” festejó (me imagino que ruidosamente, si no nadie lo hubiera notado) la resolución del TRIFE contra la coalición Guerrero nos Une, que postuló al hoy gobernador electo, Angel Aguirre Rivero.
Yo, la verdad, pensé, por tanta algarabía, que ya habían logrado que anularan la elección de enero pasado, pero resulta que el TRIFE sólo obligó al IEEG a multar con 200 salarios mínimos a la coalición triunfadora del proceso por actos que fueron calificados como adelantados de campaña. O sea, multó a los aguirristas con ¡10 mil pesos! Juar, juar, juar. Lo más curioso es que el TRIFE falló en favor del candidato que comenzó su campaña hace como dos años. Pero se ve que los aguirristas no quieren engordar el caldo de los añorvistas con la presentación de elementos que prueban que los quejosos convirtieron la elección en un cochinero. Pero como perdieron... bien se las pueden perdonar.
Vaya usted a saber si será cierto, pero afirman que varios de los presentes sacaron de su cartera 10 billetes de a mil para pagar la “cuantiosa” multa, mientras se orinaban de la risa. Y no es todo, platican que, ya encarrerados, los impugnadores dijeron que, así como sacaron este grandioso triunfo de los 10 mil, cualquier rato se puede caer la gubernatura que Aguirre tiene bien agarrada.
¡Ah que chistosos son el Efrén y el Roberto! Creo que equivocaron su vocación.