miércoles, 16 de diciembre de 2009

Los frutos de un mal trabajo


Las Dentelladas

Por El Tiburón

            Recordará usted que los comités municipales del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Costa Grande se han visto envueltos, en los últimos años, en situaciones de inestabilidad, de falta de legalidad y carencia de liderazgo. En algunos casos la dirigencia estatal de ese partido nunca se ha tomado la molestia de legitimar a esos comités municipales, seguramente por las disputas internas que se han exacerbado, pero lo cierto es que el PRD no ha contado con sus estructuras municipales debidamente integradas para realizar sus tareas políticas.
            Aquí en Zihuatanejo, en los últimos años, todos los intentos de renovación de los comités municipales del “Pederré” han terminado en pleitos entre los mismos perredistas, al grado de que, en algunas ocasiones han llegado a los empujones como ocurrió hace algunos años en un conocido restaurante de Playa La Ropa, donde hubo hasta fregadazos, mentadas y amenazas de muerte, según denunciaron algunos de los participantes.
            Pensábamos que la bronca sólo era de Guerrero y particularmente de la Costa Grande, pero no, se ha comprobado que una gran cantidad de  comités municipales enfrentan el mismo tipo de problemas. Un análisis de la Secretaría de Organización del PRD, dado a conocer el día de ayer en una nota del periódico nacional La Jornada, señala que ese partido cuenta con más de 1,600 comités municipales que operan con dirigencias interinas desde hace varios años o no han sido formalmente reestructurados o de plano no existen.
            El Consejo Nacional del partido amarillo determinó que los perredistas deben celebrar elecciones para renovar sus comités municipales a más tardar en febrero de 2010, así que en muchos municipios los perredistas han comenzado a moverse para cumplir con esa directriz del Consejo.
            Aquí en Guerrero, el presidente del Comité Estatal, a quien por cierto nadie hace caso, Misael Medrano, está impulsando que en Guerrero no se realicen elecciones sino reuniones de consenso para nombrar planillas de unidad. Medrano teme que si el PRD celebra elecciones en los municipios terminará haciéndose pedazos.
            Hasta donde se sabe, en algunos municipios como Zihuatanejo se han celebrado reuniones y hasta un intento por integrar una planilla con los grupos afines al ex diputado federal, Amador Campos Aburto. Sin embargo no han faltado las protestas por lo que consideran un procedimiento antidemocrático, por que, según dicen los afectados, faltan por integrarse algunos grupos de ese partido a la planilla “de unidad”.
            Como decíamos, se pensaba que el problema sólo afectaba a Zihuatanejo, pero ya vimos que el número de Comités municipales perredistas con problemas son muchos. Y seguramente los problemas son similares: Pleitos entre los grupos, escasa representatividad, liderazgos muy endebles, en fin.
            Y no podría ser de otro modo, un partido cuyas corrientes principales se han enfrentado en cruentas batallas políticas al interior; un partido cuyos dirigentes, en su mayoría, no están ligados a grupos de ciudadanos organizados y son simples burócratas del partido que se han enquistado en las posiciones de dirección, un partido que ha perdido el rumbo de la izquierda, que se ha alejado de los principios ideológicos que caracterizan a las izquierdas no podía dar como resultado sino una estructura municipal sin fuerza, con líderes que no mueven ni a sus familiares, sin reconocimiento legal por parte de los órganos del partido, un partido de gelatina.